Las metodologías ágiles ayudan a las empresas a transformar su forma de gestionarse interna y externamente. Minimiza los riegos, facilita la toma de decisiones, crea equipos autónomos, mejora la satisfacción de los clientes y muchas ventajas más. Si quieres conocerlas todas, sigue leyendo estas 8 razones para estudiar metodologías ágiles.
Si bien es cierto que las metodologías ágiles nacieron en el mundo del software a principios de los años 2000, su popularidad y uso se fue expandiendo, haciendo de la agilidad más que una herramienta, una filosofía de trabajo.
¿Qué mejoras dan las metodologías ágiles?
Para conocer algunas de las mejoras, es importante conocer cuáles son los 4 fundamentos del Manifiesto Ágil:
- Individuos e interacciones sobre procesos y herramientas.
- Proyecto (software) funcionando sobre documentación extensiva.
- Colaboración con el cliente sobre negociación contractual.
- Respuesta ante el cambio sobre seguir un plan.
En un mundo tan cambiante cada vez más empresas se aventuran en cambiar su forma de trabajar implementando metodologías ágiles. Este cambio tiene como objetivo volverse más competentes en el mercado diferenciándose con valor y mejorando su posicionamiento.
Estos cambios son necesarios, sobre todo en la actualidad empresarial, que fuerza a los negocios a crear mejores ideas para adaptarse a los cambios y necesidades del mercado. Aquí te damos algunas razones para estudiar metodologías ágiles y comenzar a implementar Agile en tu organización y te decimos algunas de las metodologías.
8 razones para estudiar metodologías ágiles.
Mantienes a tus clientes más satisfechos
Para la agilidad es importante mantener a nuestros clientes y usuarios satisfechos con nuestros productos y servicios. Ellos forman pieza clave para que nosotros alcancemos el éxito y mejoremos como empresa. Por ello, dentro de las empresas ágiles la colaboración con el cliente es básica para poder dar entregables de la más alta calidad. El cliente se vuelve parte del equipo, ayudando con un feedback más rápido y responsivo para resolver las necesidades o problemáticas reales.
Reduces riesgos y costos
Implementar prácticas y metodologías ágiles en tu forma de trabajar te permitirá crear mejores estrategias que reduzcan los costos y riesgos de tus productos. Una estrategia ágil permite tener mayor eficiencia en el trabajo, lo que se traduce a una reducción de costes. Los ciclos de la agilidad significan un menor número de horas de ejecución y un ahorro en tiempos, además, se combate la resistencia al cambio y al estar actualizado y con un feedback rápido, se reducen riesgos o posibles fallos. Design Thinking es una de las metodologías que te permite analizar el contexto completo y elaborar verdaderas soluciones a los problemas de tus clientes.
Trabajas por sprints
Otro de las razones para estudiar metodologías ágiles es que al implementarlas en tu trabajo podrás trabajar por sprints. ¿Y eso qué es? Fácil, divides un gran proyecto en entregables funcionales más pequeños para minimizar la carga de trabajo, pero maximizar el valor. Al estudiar metodologías ágiles, aprendes que no tienes que ver tu trabajo como un gran todo, sino trabajar eficazmente y tomar alternativas al modelo de cascada tradicional. Implementado el marco Scrum, por ejemplo, puedes desarrollar proyectos de valor en menor tiempo.
Eres más flexible a los cambios del mercado
Al trabajar por sprints es más sencillo adaptarte a las necesidades del mercado. Así creas una respuesta flexible que garantiza una actualización constante con las demandas de tu público. La flexibilidad de agile se aplica en todas las empresas, éstas se adaptan al negocio y no al revés. Si tus equipos están sufriendo de resistencia al cambio en general, el agile coaching puede ayudarte a dar mentoría a tus equipos y eliminar los impedimentos que les impiden avanzar. NOTA: Agile no es lo mismo a improvisar, claramente existe una estrategia con objetivos a seguir, pero lo bueno de la agilidad es que esta estrategia está abierta al cambio y permite ser modificada cuando sea necesario.
Mejoras la cultura organizacional
Otra de las razones para estudiar metodologías ágiles es entender que se puede aplicar desde el corazón de la empresa: Recursos Humanos. La aseguradora ING implementó agilidad en su organización para adaptarse y dirigirse en una nueva dirección. La empresa revaluó a sus empleados para determinar quiénes eran los colaboradores más entrenados para su cargo, a quiénes podrían entrenar para realizar nuevas actividades y a quiénes debían dejar ir. Así, ING implementó metodologías ágiles para la gestión de su organización. Mejora tus procesos de evaluación y reclutamiento para contratar al “talento con más talento”, para esto existe específicamente Agile HR. La agilidad no está solo en TI.
Fomentas la motivación y el trabajo en equipo
Si buscas más razones para estudiar metodologías ágiles, el fomentar la motivación y el trabajo en equipo puede ser una buena causa. Si estás sufriendo de por no saber cómo implementar un verdadero salario emocional o estrategias efectivas que mantengan la motivación de tus colaboradores existe la práctica de Management 3.0. Al estudiar esta práctica ágil, mejorarás tus habilidades de liderazgo y gestión de equipos. Crearás un mejor clima laboral, propiciando la comunicación e interacción entre los equipos y áreas. Recuerda, un equipo motivado es un equipo productivo.
Generas equipos autónomos y autoorganizados
En las prácticas y metodologías ágiles los equipos aprenden a empoderarse, a tomar sus propias responsabilidades y gestionar su trabajo. No es necesario supervisar el trabajo 24/7, pues cada integrante del equipo está enterado de sus deberes y permanece en contacto con sus compañeros para realizar sus actividades. Por ejemplo, Kanban te permitirá gestionar tus tareas y revisar grupalmente si existe algún problema o cuello de botella para actuar y resolver. Por otro lado, en DevOps se promueve la comunicación fluida, así como la colaboración, visibilidad, integración y transparencia entre los equipos de desarrollo y de operaciones.
Actualizas tu conocimiento
Finalmente (pero no menos importante) en nuestra lista de razones para estudiar metodologías ágiles está el mismo estudio. El mantenerte aprendiendo y renovando tus conocimientos mejorará tu calidad de vida. Este cambio se aplica en el ámbito profesional pues te actualizas con las tendencias empresariales, le demuestras a la organización que te preocupa su bienestar. Además influye en el ámbito personal al adquirir conocimiento, mantener tu mente activa y ¿por qué no? Recibir un certificado o diploma al finalizar tus estudios. Eso también nos motiva a seguir creciendo.
